Agencia de Periodismo Investigativo - @Agencia_API Twitter
Agencia de Periodismo Investigativo – @Agencia_API Twitter

El vandalismo en el sistema de transporte masivo Transmilenio de Bogotá es un problema que afecta tanto a la infraestructura como a los ciudadanos. Las protestas y alteraciones al orden público son responsables del 48 % de los daños, según Transmilenio. La concejala de Bogotá, Diana Diago, presentó un proyecto de acuerdo en el cabildo para abordar esta problemática.

Cada vez que hay una protesta, la infraestructura de Transmilenio sufre daños significativos. Las estaciones son vandalizadas, destruidas e incluso incineradas. Un ejemplo reciente es la marcha de Fecode, durante la cual varias estaciones, como Centro Memoria, fueron vandalizadas. Estos daños incrementan el déficit del sistema, que ya enfrenta problemas como los colados. Al final, los bogotanos asumen parte del costo cada año. Desde el concejo, se denuncia que el costo de los daños en Transmilenio asciende a $17.500 millones.

Diana Diago, concejala del Centro Democrático, solicitó un informe sobre los daños provocados en el sistema de transporte. Según la respuesta, entre 2020 y 2023 se registraron 790 casos de vandalismo. Las manifestaciones fueron responsables del 48 % de estos casos. Además, se reportaron 249 casos de vidrios rotos y el 20 % de los casos involucraron grafitis con ácido. Es importante destacar que, de los $17.500 millones en daños, más de $15.000 millones corresponden al año 2021, durante el Estallido Social. En 2023, los actos vandálicos en el sistema costaron más de $100 millones a los bogotanos.

Ante esta situación, la concejala Diago presentó un Proyecto de Acuerdo para enfrentar el problema. “Necesitamos mano dura y sanciones contra los criminales que destruyen nuestra ciudad. No podemos tolerar más actos de vandalismo”, afirmó. El informe también revela que hubo 1.706 capturas por daño en bien ajeno en Bogotá, según datos del SIEDCO de la Policía Metropolitana y la Secretaría de Seguridad.

El vandalismo en Transmilenio no solo afecta la infraestructura, sino también la calidad del servicio. Los usuarios enfrentan retrasos y estaciones en mal estado. Además, el costo de las reparaciones se traduce en menos recursos para mejorar el sistema. La situación es insostenible y requiere medidas urgentes.

El Proyecto de Acuerdo presentado por Diago propone sanciones más severas para los responsables de los actos vandálicos. Sin embargo, es crucial considerar otras estrategias. La educación y la concienciación ciudadana son fundamentales. Campañas que promuevan el cuidado del sistema y la denuncia de actos vandálicos pueden ser efectivas.

Además, es necesario mejorar la seguridad en las estaciones y en los buses. La presencia de más policías y guardias de seguridad podría disuadir a los vándalos. También se podrían instalar cámaras de vigilancia en puntos estratégicos para identificar a los responsables.

Otra medida podría ser la implementación de programas de rehabilitación para los vándalos capturados. En lugar de solo imponer sanciones, se podría ofrecer educación y formación laboral. Esto podría reducir la reincidencia y ayudar a los individuos a reintegrarse en la sociedad.

El problema del vandalismo en Transmilenio es complejo y multifacético. Requiere un enfoque integral que combine sanciones, educación, seguridad y rehabilitación. Solo así se podrá proteger la infraestructura del sistema y garantizar un servicio de calidad para los bogotanos.

Comentarios
You May Also Like

Incendios en Colombia: El frailejón y la crisis ambiental

Los incendios en el páramo de Berlín amenazan los frailejones y la seguridad hídrica de Colombia, exigiendo acciones urgentes de conservación.

Quién era Luis Alfredo Garavito: La Bestia de la historia criminal de Colombia

Luis Alfredo Garavito, conocido como ‘La Bestia’, es recordado como un pederasta y asesino en serie de niños en Colombia. Fue condenado a 1853 años de cárcel, la condena más alta registrada en el país.