En una reciente entrevista, Olmedo López, exdirector de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd), reveló detalles alarmantes sobre un escándalo que involucra a la entidad y que salpica tanto al Gobierno nacional como al Congreso de la República. Según López, más de cinco congresistas estarían implicados en este escándalo, y se realizaron pagos para favores políticos con el objetivo de aprobar las reformas que el Gobierno Petro adelanta en el Congreso.
López afirmó que recibió órdenes de un “alto nivel” para entregar tres mil millones de pesos al presidente del Senado, Iván Name, y mil millones a Andrés Calle, presidente de la Cámara de Representantes. Además, mencionó una tercera orden para entregar un monto inferior a mil millones, cuyo destinatario aún no ha sido especificado. “Voy a responder con todas las consecuencias que yo haya traído, también lo voy a hacer porque no solamente fueron dos órdenes las entregadas al subdirector, fueron más que eso”, agregó López.
El exdirector de la Ungrd también criticó las noticias que lo acusan de apropiación de dineros en la entidad, calificándolas como “noticias diarias amarillistas”. Sin embargo, afirmó estar dispuesto a asumir las consecuencias de sus actos. “Estoy dispuesto y lo voy a hacer asumir esa responsabilidad. Di otras instrucciones que nacieron del director, no me lucré y sé que beneficiaron a otros procesos en la entidad”, manifestó.
López explicó que decidió hablar públicamente sobre lo sucedido en la Ungrd para que la Fiscalía General de la Nación escuchara sus denuncias. “La petición surge desde la primera semana de mi salida de la Ungrd. Pasaron cerca de dos meses hasta que por fin obtuvimos respuesta de la Fiscalía”, indicó.
Durante la entrevista, López también mencionó haber recibido un mensaje del ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, lo cual incrementó su temor de que la verdad no saliera a la luz. “Acabo de ver el mensaje del ministro del Interior, y eso, la verdad, hace parte de ese miedo que tengo para que el país conozca la verdad”, señaló. Además, recordó que el ministro del Interior “tiene mucho que contarle al país, por eso su reacción, él era uno de los que daba instrucciones”.
López no especificó si el mensaje lo recibió en su dispositivo móvil, pero afirmó que el ministro lo llamó “sicario”. Además, denunció varios casos ante la Fiscalía, incluyendo un maletín con 500 millones de pesos en efectivo, que según él, pertenecía a un amigo del doctor Luis Fernando Velasco.
El exdirector de la Ungrd también subrayó que lo sucedido en la entidad es solo una parte de un problema más amplio que afecta a otras entidades gubernamentales. “Esto está pasando en más entidades del país. Yo hablaré por los hechos que conocí y que tengo sustento”, aseveró López.
López aseguró que la Ungrd no solo se ha convertido en la “caja menor” del actual Gobierno, sino de todos los anteriores. “La Unidad Nacional de Gestión del Riesgo es una entidad a la que le deben de prestar toda la atención desde los primeros días de su creación en el año 2012. No son nuevos los escándalos en este Gobierno, siguieron con las mismas prácticas al final de los tiempos”, manifestó.
Finalmente, Olmedo López indicó que “no tengo manera diferente a decirle al país: nos equivocamos, lo reconozco, estoy asumiendo y creo que también el asumirlo significa contar la verdad y sólo la verdad y contarla donde hay que contarla”.
Este escándalo pone en evidencia la necesidad de una mayor transparencia y control en las entidades gubernamentales. Las declaraciones de López sugieren que la corrupción y el uso indebido de recursos públicos son problemas sistémicos que requieren una intervención urgente. La ciudadanía espera que las autoridades competentes tomen medidas efectivas para investigar y sancionar a los responsables, y que se implementen mecanismos que eviten la repetición de estos hechos en el futuro.
En este contexto, es crucial que los medios de comunicación y la sociedad civil mantengan una vigilancia constante sobre las acciones del Gobierno y el Congreso. Solo así se podrá garantizar que los recursos públicos se utilicen de manera adecuada y en beneficio de todos los ciudadanos. La transparencia y la rendición de cuentas deben ser pilares fundamentales en la gestión pública para recuperar la confianza de la ciudadanía en sus instituciones.
