El último día de la ventana de mercado de verano ha sido testigo de un movimiento sorprendente en el mundo del fútbol. Joao Félix, el talentoso futbolista portugués, ha decidido abandonar el Atlético de Madrid. Este viernes 1 de septiembre, se anunciará oficialmente su salida, una decisión que ha sido tomada después de que el club madrileño le renovara hasta 2028 por cuestiones de ‘Fair Play Financiero’. El nuevo destino de Félix es el FC Barcelona, un club que él mismo había expresado su deseo de unirse.
La salida de Ansu Fati, que se dirige al Brighton de Inglaterra, era la pieza que faltaba en este rompecabezas. Si Félix no se unía al Barça, tenía hasta el 20 de septiembre para aceptar una oferta de Arabia. Sin embargo, este viernes, Joao aterrizó en Barcelona junto a su agente, Jorge Mendes, para finalizar los detalles y firmar con los catalanes. Se espera que la operación sea una cesión simple, sin opción de compra, y con el FC Barcelona asumiendo el salario del futbolista. No se realizará ningún pago al Atlético por la cesión.
En el pasado mercado invernal, Joao Félix había sido cedido al Chelsea con la esperanza de que pudiera desarrollar mejor su fútbol. Sin embargo, no logró mostrar su mejor versión. Por lo tanto, en la actual ventana de traspasos, el nombre de Félix volvió a ser uno de los protagonistas. Simeone, el entrenador del Atlético, tenía que decidir si quería contar con él en la plantilla o buscarle una nueva cesión. Finalmente, se optó por la segunda opción. Félix no tuvo minutos ni en la pretemporada ni en los tres primeros partidos de la campaña liguera del Atleti.
En julio pasado, el Atlético de Madrid había pedido a Joao Félix que se retractara públicamente de unas declaraciones en las que afirmaba que “jugar en el Barcelona sería un sueño”. Estas palabras no fueron bien recibidas en la entidad rojiblanca, ni por la directiva ni por el vestuario. Ambas partes preferían la salida del portugués en este mercado de fichajes.
La primera opción era traspasar a Félix, pero había un problema. El Atlético no aceptaría nada por debajo de los 80 millones de euros, y en estos momentos, no hay ningún club dispuesto a pagar esa cantidad por el portugués. Por otro lado, también existía la opción de una cesión, que era la más factible y en la que podía entrar en juego el FC Barcelona. Finalmente, fue lo que ocurrió.
El 31 de agosto, durante el sorteo de la fase de grupos de la Champions League, Enrique Cerezo, presidente del Atlético de Madrid, fue consultado en “Movistar” acerca del futuro de Joao Félix. Respondió que Félix seguía siendo del Atlético, pero que estaban esperando a ver cómo se resolvía la situación. Añadió que Félix quería irse al Barcelona y que estaban esperando a ver si se decidían o no. También mencionó que siempre hay ofertas por los grandes jugadores.
El vestuario del Atlético de Madrid estaba muy molesto con la actitud de Joao Félix. Desde que regresó de su cesión en el Chelsea, no ha hecho muchos méritos para encajar con la plantilla del ‘Cholo’ Simeone. Sus palabras a Fabrizio Romano, un periodista especializado en fichajes, fueron la gota que colmó el vaso. Félix declaró su deseo de jugar para el FC Barcelona, una actitud que no sorprendió a sus compañeros, pero que tampoco les gustó.
Félix le dijo a Romano que le encantaría jugar en el Barcelona. Afirmó que el Barcelona siempre ha sido su primera opción y que le encantaría unirse al Barça. Dijo que siempre ha sido su sueño desde que era niño y que si sucede, será un sueño hecho realidad para él. Este deseo, ahora, se ha convertido en realidad.
