Evo Morales” by Sebastian Baryli is licensed under CC BY 2.0

El expresidente de Bolivia, Evo Morales, quien estuvo al frente del país desde enero de 2006 hasta noviembre de 2019, ha anunciado este domingo en X, a través de su cuenta de Twitter, su intención de postularse nuevamente para el cargo máximo de su país en las elecciones de 2025. Este anuncio ha sorprendido a muchos, pero también ha generado una serie de reacciones tanto dentro como fuera de Bolivia.

Morales, de 63 años, ha explicado en su publicación que su decisión de anunciar su candidatura se debe a los “ataques del gobierno”. Según el exmandatario, el actual Gobierno del presidente Luis Arce, a través del Ministerio de Justicia, está conspirando para implicarlo en casos de corrupción. Esta es una acusación grave que, de ser cierta, podría tener serias implicaciones para el actual gobierno.

Medios ha intentado ponerse en contacto con el Ministerio de la Presidencia de Bolivia para obtener una respuesta a las acusaciones de Morales y para saber si el presidente Arce buscará la reelección. Sin embargo, hasta el momento, no ha recibido ninguna respuesta. Esto ha dejado a muchos en la incertidumbre sobre cuál será el próximo movimiento del gobierno boliviano.

En su anuncio, Morales ha declarado: “Hemos decidido aceptar los pedidos de nuestra militancia y de tantas hermanas y hermanos que asisten a las concentraciones en todo el país para ser candidato a la presidencia de nuestra querida #Bolivia”. Además, ha prometido dar todo lo que pueda y ha afirmado que todavía tiene fuerza.

Este anuncio de Morales llega en un momento de división dentro del Movimiento al Socialismo, que enfrenta al oficialismo entre el sector de Arce y el de Morales. Arce fue Ministro de Economía de Bolivia durante el mandato de Morales. En 2020, mientras Morales estaba exiliado en Argentina, respaldó la candidatura de Arce.

Por otro lado, un exministro de Hacienda ha pronosticado una debacle económica en Bolivia, afirmando que el país “va a ir en el camino de Venezuela”. Esta es una afirmación preocupante que, de ser cierta, podría tener graves consecuencias para el pueblo boliviano.

La situación política en Bolivia es compleja y llena de incertidumbre. Con el anuncio de la candidatura de Morales, se abre un nuevo capítulo en la historia política del país. Sin embargo, también se plantean muchas preguntas sobre el futuro de Bolivia, especialmente en lo que respecta a su economía y a la estabilidad política. Solo el tiempo dirá cómo se desarrollarán estos eventos y qué impacto tendrán en el país y su gente.

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