La mañana del martes comenzó con una sorpresa para los hinchas de Atlético Nacional. Un video intrigante, publicado en las redes sociales del club, mostraba una lata de espinacas haciendo referencia a Popeye “El Marino”. Este guiño humorístico y nostálgico generó una ola de expectativa y especulación entre los seguidores verdolagas. Horas más tarde, el misterio fue resuelto: Marino Hinestroza, el joven y talentoso extremo, se unía a las filas de Nacional como uno de los nuevos refuerzos del club.
Marino Hinestroza, a pesar de su corta edad, ya tiene una carrera notablemente diversa. Se formó en el Orsomarso SC y debutó en el primer equipo de la Primera B en 2018. Su talento pronto llamó la atención de clubes más grandes, y en 2019 fue adquirido por el América de Cali. Sin embargo, su carrera pronto tomó un rumbo internacional.
En marzo de 2020, Hinestroza fue cedido al Palmeiras de Brasil, una experiencia que le permitió ganar valiosas habilidades y exposición en una de las ligas más competitivas de Sudamérica. Su talento y versatilidad lo llevaron a firmar con el Pachuca de México en el mismo año, donde se convirtió en parte integral del plantel que ganó el Apertura 2022. Después de su éxito en México, Marino continuó su carrera en el extranjero, siendo adquirido por el Columbus Crew de la MLS. Su tiempo en Estados Unidos le brindó una nueva perspectiva y le permitió desarrollar aún más su estilo de juego antes de regresar a Colombia para unirse a Atlético Nacional.
Con apenas 22 años, Marino Hinestroza llega a Nacional con una combinación de juventud y experiencia que promete ser invaluable para el equipo. Juega como extremo y tiene la capacidad de desempeñarse tanto por la banda derecha como por la izquierda, ofreciendo así una flexibilidad táctica que será crucial para el entrenador.
Su capacidad para desbordar, su velocidad y su habilidad para generar oportunidades de gol son algunas de las características que han definido su carrera hasta ahora. Estas cualidades no solo reforzarán el ataque de Nacional, sino que también agregarán una nueva dimensión al estilo de juego del equipo. El fichaje de Hinestroza no es solo una adición estratégica; es también una declaración de intenciones por parte de Atlético Nacional. El club está en busca de revitalizar su plantilla con talento joven y prometedor, jugadores que puedan contribuir de inmediato y también desarrollarse a largo plazo.
La llegada de Marino Hinestroza a Nacional no solo ha generado entusiasmo entre los hinchas, sino que también ha puesto de manifiesto la estrategia del club para el futuro. En un mercado de fichajes cada vez más competitivo, la capacidad de atraer a jóvenes talentos con experiencia internacional es un signo de la ambición del club. Además, la versatilidad de Hinestroza le permitirá al entrenador experimentar con diferentes formaciones y tácticas, lo que podría ser crucial en momentos decisivos de la temporada.
Es importante destacar que la carrera de Hinestroza ha sido un viaje de aprendizaje constante. Desde sus inicios en Orsomarso SC hasta su paso por ligas de Brasil, México y Estados Unidos, cada etapa ha contribuido a su desarrollo como jugador. Esta experiencia acumulada le da una ventaja sobre otros jugadores de su edad, y su capacidad para adaptarse a diferentes estilos de juego será un activo valioso para Nacional.
El fichaje de Marino Hinestroza también refleja una tendencia más amplia en el fútbol colombiano. Los clubes están cada vez más interesados en desarrollar y retener talento joven, en lugar de depender únicamente de jugadores veteranos. Esta estrategia no solo es beneficiosa para los clubes, sino que también contribuye al crecimiento del fútbol colombiano en general. Al invertir en jóvenes promesas como Hinestroza, los clubes están construyendo una base sólida para el futuro.
