El ataque de Hamas ha supuesto un fracaso estrepitoso para las fuerzas de inteligencia y seguridad de Israel. Alrededor de 1,000 militantes de Hamas llegaron a Israel y atacaron a civiles y objetivos militares, a pesar de que las fuerzas de seguridad de Israel se han centrado en Hamas durante décadas. Al menos 700 israelíes fueron asesinados.
Los servicios de inteligencia y seguridad de Israel han sido cuestionados por no haber anticipado el ataque a gran escala lanzado por el grupo militante palestino Hamas el sábado. Según algunos informes, alrededor de 1,000 militantes dispararon a civiles y objetivos militares dentro de Israel en un ataque sin precedentes en escala. Según los medios israelíes, al menos 700 israelíes fueron asesinados y más de 2,100 resultaron heridos. Israel respondió lanzando ataques aéreos contra objetivos en la Franja de Gaza. Más de 400 palestinos han sido asesinados y más de 2,300 resultaron heridos. Es probable que el número de muertos aumente a medida que continúen los combates.
Israel se había enorgullecido durante mucho tiempo de su avanzada valla fronteriza y muro subterráneo cerca de Gaza. Pero el sábado, los combatientes de Hamas lograron violar la valla fronteriza en al menos un lugar con explosivos y con equipo pesado, según videos de la escena. Los militantes también llevaron a cabo una operación anfibia en el Mar Mediterráneo y utilizaron parapentes para llegar a dos docenas de lugares en Israel. El grupo militante también lanzó miles de cohetes, para sorpresa de las agencias de inteligencia y el sistema de vigilancia de Israel. Se cree que Israel puede escuchar casi cualquier llamada telefónica en Gaza y tiene un gran número de informantes allí.
“Ellos han estado planeando esto durante mucho tiempo”, dijo el ex asesor de seguridad nacional de Israel, Eyal Hulata, a Reuters. “Obviamente, este es un ataque muy coordinado, y desafortunadamente pudieron sorprendernos tácticamente y causar un daño devastador”. El aparato de inteligencia israelí había centrado su atención en otros lugares. En los últimos meses, gran parte del enfoque de las Fuerzas de Defensa de Israel ha estado en Cisjordania, donde batallones de jóvenes palestinos han lanzado su propia iniciativa contra la ocupación israelí.
Los funcionarios israelíes también han estado preocupados por las tensiones en torno a la Mezquita de Al-Aqsa, el sitio musulmán más sagrado de Jerusalén, también sagrado para los judíos como el Monte del Templo, después de que la policía israelí realizara redadas contra los adoradores en abril. “Había muchos activos y recursos centrados en monitorear los eventos en Jerusalén”, dijo Hoffman. En casa, Israel estaba dividido y celebraba una fiesta. El país se ha vuelto cada vez más dividido y plagado de problemas políticos internos. En julio, el parlamento de Israel votó para evitar que los jueces anularan las decisiones del gobierno con el argumento de que son “irrazonables”.
Los controvertidos cambios en el poder judicial, impulsados por el gobierno de extrema derecha del primer ministro Benjamin Netanyahu, provocaron indignación pública y protestas masivas. Algunos miembros de la reserva militar de Israel también se negaron a presentarse al servicio recientemente, aunque todos se presentaron al servicio en esta crisis. Hoffman dijo que no es sorprendente que Hamas eligiera atacar durante un momento polarizador. “Atacan precisamente cuando sienten una oportunidad”, dijo Hoffman. “Cuando ven una brecha generalmente en las defensas de su enemigo, generalmente causada por la distracción o la preocupación por otras amenazas o desafíos”. El asalto también tuvo lugar durante el Shabat judío y en las primeras horas de la festividad de Simjat Torá. Los soldados israelíes que custodiaban la frontera escribieron en las redes sociales que los militantes tomaron su base, matando a soldados, y había menos tropas de servicio porque era una festividad judía.
En Gaza, el ejército israelí no esperaba un asalto terrestre. Durante la última década, Hamas ha atacado en gran medida a Israel lanzando cohetes. Como resultado, las fuerzas israelíes alrededor de Gaza no estaban preparadas para un asalto terrestre, dijo Hoffman. “No estaban en absoluto listos para la batalla”, dijo. “Creo que había una complacencia de que todo estaba tranquilo en la frontera con Gaza”. Eso debería haber sido sospechoso y preocupante, agregó. Por otro lado, Hoffman dijo que la escala y la complejidad del ataque eran inimaginables y abrumadoras. Hoffman, quien describió la inteligencia de Israel como “la segunda mejor” después de la de EE. UU., dijo que la combinación de ataques aéreos, terrestres y marítimos de Hamas era “sin precedentes” para los grupos terroristas en la historia reciente. Israel y los EE. UU. han etiquetado a Hamas, que controla la Franja de Gaza, como un grupo terrorista. “No recuerdo ninguna vez en que un grupo fuera capaz de juntarlos y organizar un asalto coordinado simultáneo utilizando los tres lugares”, dijo. Greg Myre y Daniel Estrin contribuyeron con informes.
