En las primeras horas de una tranquila madrugada, específicamente a las 12:35 a.m. del martes 27 de febrero, un trágico suceso sacudió el anillo vial que conecta Floridablanca con Girón, en Santander. Un accidente de tráfico, que involucró una motocicleta y un taxi, se cobró la vida de Shelsey Daniela Nougues Guerrero, una joven de 20 años con un futuro prometedor, y dejó a su hermano, Arturo Nougues, luchando por su vida en un hospital.
Shelsey Daniela, quien viajaba en la motocicleta KTM Duke 390 de placa ZLU-33D, conducida por su hermano, perdió la vida cuando el vehículo se estrelló contra la parte trasera de un taxi de placas XVW-749. Según los informes preliminares, el conductor del taxi intentó realizar una maniobra prohibida al tratar de cruzar el separador de la vía, lo que resultó en el fatal encuentro.
La joven, oriunda de Zapatoca y residente en Piedecuesta, era una estudiante de quinto semestre de ingeniería industrial en la Universidad Pontificia Bolivariana (UPB). Además, Shelsey Daniela estaba dando sus primeros pasos en el mundo del modelaje y el emprendimiento en el sector de la belleza, mostrando un espíritu emprendedor y una pasión por la vida que la hacían destacar.
La comunidad universitaria, encabezada por el rector seccional Gustavo Méndez Paredes, expresó su profundo pesar por la pérdida de una de sus estudiantes más prometedoras. En un mensaje de condolencia, la UPB extendió su solidaridad a la familia y amigos de Shelsey Daniela, ofreciendo oraciones y apoyo en estos momentos de inmensa tristeza.
La familia Nougues, devastada por el accidente, ha solicitado oraciones por la pronta recuperación de Arturo, quien se encuentra en estado crítico. La comunidad ha respondido con mensajes de apoyo y solidaridad, reflejando el impacto que Shelsey Daniela y su familia han tenido en sus vidas.
Las autoridades locales, bajo la dirección de Rafael Marín, director de tránsito de Floridablanca, han iniciado una investigación para esclarecer las circunstancias exactas del accidente. La Fiscalía ha tomado el caso, dada la gravedad de las acciones del conductor del taxi, que aparentemente violó las normas de tráfico al intentar cruzar el separador de manera ilegal. Este incidente pone de relieve la importancia de adherirse a las leyes de tráfico y la necesidad de una mayor conciencia sobre la seguridad vial para prevenir futuras tragedias.
Este trágico evento no solo ha dejado un vacío en el corazón de la familia Nougues y la comunidad universitaria, sino que también ha generado un llamado a la reflexión sobre las responsabilidades que todos compartimos en la carretera. La pérdida de una joven con tanto potencial es un recordatorio sombrío de lo preciosa que es la vida y de cómo puede ser arrebatada en un instante por decisiones imprudentes. Mientras la comunidad llora y busca consuelo, la memoria de Shelsey Daniela Nougues Guerrero permanecerá como un símbolo de esperanza y un recordatorio de la importancia de vivir cada momento al máximo, respetando siempre las reglas que nos protegen a todos.